La “salud del cerebro” puede describirse como la capacidad de hacer una variedad de cosas que ayudan a la mente a mantenerse activa y conservar ventajas mentales a lo largo de la vida. Ha habido mucho énfasis en las actividades que mantienen la mente ocupada, tales como un crucigrama o ejercicio de Sudoku, y ahora incluso algunos video juegos están específicamente desarrollados para estimular nuestro cerebro. Pero también debe destacarse la importancia de una buena nutrición y, de acuerdo con un nuevo estudio clínico, el consumo de suplementos diarios con vitaminas B también puede ayudar a retrasar el deterioro mental relacionado con la edad que todos quisiéramos evitar.

El estudio, realizado por investigadores de la Universidad de Oxford y de la Universidad de Oslo, descubrieron que un suplemento diario en personas con deterioro cognitivo leve (MCI, por sus siglas en inglés) que combinara ácido fólico con vitaminas B6 y B12, se asociaba con una reducción en los niveles de homocisteína, un aminoácido que aumenta con el paso del tiempo y está relacionado con el deterioro de las funciones mentales cuando se presenta en grandes cantidades. El cóctel de vitaminas B también mejoró ciertos aspectos de la función mental en aquellos que lo consumieron.

El estudio incluyó a 223 personas mayores de 70 años con MCI. Los individuos fueron asignados aleatoriamente a uno de dos grupos: un grupo placebo o un grupo que recibía el suplemento de vitamina B. Luego del experimento de dos años, los niveles de homocisteína aumentaron en el grupo placebo pero disminuyeron significativamente en el grupo que consumía el suplemento de vitaminas B. Además, quienes se encontraban en el grupo placebo tenían más deterioro cognitivo en comparación con el grupo que recibió el suplemento.

No es sorprendente que los efectos más significativos fueron observados en los individuos que comenzaron con mayores niveles de homocisteína. Para quienes tomaron vitaminas B con niveles inferiores de homocisteína en la sangre, el índice de atrofia cerebral se redujo en un 30 por ciento; quienes tenían mayores niveles de homocisteína redujeron su índice de atrofia cerebral en un 53 por ciento.

Al considerar los datos, los investigadores señalaron: “Nuestra interpretación es que disminuir las concentraciones de homocisteína administrando vitaminas B retrasa la atrofia cerebral [deterioro del cerebro], lo cual a su vez retrasa el deterioro cognitivo y clínico”.

Los autores concluyen: “Nuestros datos indican que las vitaminas B pueden retrasar el deterioro clínico y cognitivo en individuos con MCI, particularmente aquellos que tienen altas concentraciones de tHcy [homocisteína]”. Este estudio confirma las evidencias epidemiológicas recientes del Rush University Medical Center en Chicago, que revelaron que individuos con niveles menores de vitamina B12 tienen más probabilidades de tener cerebros más pequeños y obtienen menores puntajes en los exámenes de habilidades cognitivas (vea más información aquí).

El MCI afecta alrededor del 16 por ciento de las personas mayores de 70 años de edad, o cerca de 5 y 14 millones de personas en Estados Unidos y Europa, respectivamente. Los investigadores definieron el MCI como “deterioro cognitivo mayor del esperado para la edad y nivel de educación de un individuo, pero que no interfiere notablemente con las actividades de la vida diaria”.

Más allá de la edad, este estudio revela una muy buena razón para ingerir vitaminas B adecuadas en la alimentación a lo largo de todas las etapas de la vida, ya que bien pueden ayudar a mantener su cerebro saludable.

Referencias:

de Jager CA, Oulhaj A, Jacoby R, Refsum H, Smith AD. Cognitive and clinical outcomes of homocysteine-lowering B-vitamin treatment in mild cognitive impairment: a randomized controlled trial. Int J Geriatr Psychiatry 2011. doi: 10.1002/gps.2758